La fumagina del olivo, también conocida como «negra de los olivos» es un hongo microscópico que afecta a los olivos. Se llama «fumagina» debido a la gran cantidad de esporas que produce y que se dispersan en el aire, formando una nube que puede cubrir las hojas y darles un aspecto oscuro. La enfermedad puede causar una reducción en la producción de frutos y, si es grave, puede matar el árbol. A menudo, las infecciones crónicas también pueden debilitar al árbol y hacerlo más propenso a otros problemas de salud.
Los síntomas de la negrala del olivo o fumagina incluyen:
- Manchas negras en las hojas: las hojas se vuelven negras y pueden caer prematuramente.
- Poda de la copa: las ramas afectadas pueden morir y deben ser podadas.
- Pérdida de rendimiento: el árbol puede producir menos frutos debido a la pérdida de hojas.
- Crecimiento más lento: el árbol puede crecer más lentamente debido a la pérdida de hojas y ramas.
- Caspa negra en la parte inferior de las hojas: la caspa negra puede ser visible en la parte inferior de las hojas afectadas.
- Crecimiento de musgos y líquenes: las hojas afectadas pueden cubrirse de musgos y líquenes debido a la falta de luz.
Existen varios remedios caseros y naturales para combatir la negrilla del olivo o fumagina:
- Mezcla de jabón y aceite: Mezcla jabón de potasa y aceite mineral en una proporción de 1:2 y aplica sobre las hojas y ramas infectadas. Repite el proceso cada 15 días.
- Polvo de ceniza: Aplica polvo de ceniza sobre las hojas y ramas infectadas. Es un efectivo repelente para los insectos.
- Infusión de ajo: Hierve una taza de agua y agrega un par de dientes de ajo machacados. Deja que se enfríe y cuela. Aplica la infusión sobre las hojas y ramas infectadas.
- Bicarbonato de sodio: Mezcla bicarbonato de sodio con agua en una proporción de 1:3 y aplica sobre las hojas y ramas infectadas. Es un excelente repelente para los insectos.
- Aceite de neem: Aplica aceite de neem diluido sobre las hojas y ramas infectadas. Es un efectivo repelente para los insectos.
Es importante recordar que para evitar la fumagina es importante mantener una buena poda en las olivas y también controlar las plagas que pueden atraer a los ácaros que causan la enfermedad.
La negra del olivo o fumagina es una enfermedad causada por un hongo llamado Fumago. Se presenta en forma de manchas negras en las hojas y brotes del olivo, lo que puede causar una disminución en la producción de aceite y una disminución en la calidad de las aceitunas.
Para tratar esta enfermedad, se recomienda lo siguiente:
- Realizar una poda de limpieza de las ramas y hojas infectadas.
- Aplicar un fungicida a base de cobre o sulfurado en los primeros días de julio.
- Aplicar un fungicida a base de óxido de cobre o sulfurado en los primeros días de noviembre.
- Rotar los fungicidas cada año.
- Realizar un buen control de la humedad y mantener el riego bajo control.
- Eliminar los residuos de la cosecha y controlar el crecimiento de la maleza.
- Monitorizar regularmente la aparición de la enfermedad y tomar medidas preventivas en caso de detectar nuevos síntomas.
Es importante tener en cuenta que un tratamiento eficaz requiere un enfoque integral y la realización de las medidas preventivas adecuadas.