El cribado en almendro es una técnica utilizada para identificar plantas que tienen un gen o conjunto de genes deseables para características específicas, como la resistencia a plagas o enfermedades, la producción de frutos de mayor calidad, o el mayor rendimiento. Esto se logra mediante el uso de marcadores moleculares, que son segmentos de ADN que se asocian con los genes deseables.
Los marcadores moleculares se utilizan para crear mapas genéticos de las plantas, y estos mapas se utilizan para seleccionar plantas que tienen los marcadores deseados. El cribado también se puede realizar mediante pruebas fenotípicas, en las cuales se observan las características externas de las plantas para identificar las plantas deseables.
El cribado de almendro se utiliza principalmente en el campo de la mejora genética, en donde los científicos buscan mejorar las características de las plantas mediante la selección y el cruzamiento. También se puede usar para identificar plantas que tienen un mayor potencial para ser utilizadas en programas de conservación de variedades.